Semanario católico Camino cumple 38 años

SANTIAGO.- El semanario católico Camino celebra este viernes el 38 aniversario de fundación, tiempo en el que lleva 983 ediciones de forma ininterrumpida.

Debido a ese acontecimiento periodístico, el vocero escrito del Arzobispado de esta ciudad lo resalta, a través del editorial del próximo domingo, titulado “Siempre fiel”.

“Por eso nuestras páginas recogen las angustias, gozos y esperanzas de nuestro pueblo y hemos querido seguir las huellas de los profetas que anuncian el bien y denuncian los males que impiden a nuestros hermanos vivir con la dignidad con la cual Dios nos ha creado”, precisa.

Camino admite que el mensaje transmitido no siempre será bien acogido “por aquellos que impiden, con sus malas acciones, la ­construcción de una sociedad más justa y solidaria, en donde el pan y la alegría no sean patrimonio de unos pocos”.

”Pero seguiremos hacia delante al servicio de la verdad y la vida. Las Bie­naventuranzas proclamadas por el maestro nos marcan la ruta a seguir”, puntualiza Camino en el editorial.

Dice que, al llegar a este nuevo aniversario, agradece a sus colaboradores el apoyo que le ofrecen. “Así podemos llevar cada semana un contenido que nos ayuda a crecer a nivel personal y comunitario”.

De igual forma, expresa su agradecimiento a todos los medios de comunicación impresos, radiofónicos, televisivos y digitales “que se hacen eco de las refle­xiones que hacemos en cada entrega con la intención de aportar a tener un país mejor”.

”Cada día estamos  más conscientes del papel que juegan los medios de comunicación en la formación de una ciudada­nía responsable capaz de asumir su rol en bien de los demás”, indica Camino.

En ese sentido, hace suyo el mensaje del papa Paulo VI, en su exhortación apostólica Evangelii Nuntiandi, en su número 45, cuando afirmó que la Iglesiase sentiría culpable ante Dios si no empleara los poderosos medios de comunicación que la inte­ligencia huma­na perfecciona cada vez más.

”Recordemos que hoy más que ayer el mun­do está sediento de Dios y los medios de comunica­ción nos brindan la oportunidad de llegar a tantos seres humanos y, de ma­nera especial, a los jóve­nes que nacieron en esta era digital, y que buscan quién los ayude a encontrar la felicidad plena”, concluye.