Informan actividades primer año de Jardín Botánico

SANTIAGO.- Al cumplir un año de inaugurado, más de 200 mil personas han visitado el Jardín Botánico Profesor Eugenio de Jesús Marcano, en tanto que un promedio de 18 mil santiagueros caminan o montan bicicletas cada mes, aprovechando las facilidades y la seguridad que brinda el lugar.

El Jardín Botánico de Santiago, inaugurado el 23 de abril del año pasado, se ha convertido en un referente obligatorio para el ecoturismo de esta ciudad con más de 600,000 metros cuadrados de extensión,  12 kilómetros de caminos y trillos, una docena de jardines temáticos, una ciclovía de casi 4 kilómetros y una serie de atractivos que lo hacen único en su género.

Durante un encuentro realizado en las instalaciones del “Café Sinfín” en el Parque Botánico, el presidente del consejo de administración,  profesor José Tavarez Henriquez,  resaltó la gran acogida que ha tenido esta obra y su impacto positivo para Santiago y la región.

Destacó que luego de la apertura formal el año pasado, ha sido posible la habilitación de un humedal, un gazebo y el mariposario,  gracias a los aportes de la la Fundación Popular, la Cooperativa la Altagracia y  Fundación Propagás.

Al mismo tiempo, más de un centenar de colegios, escuelas y otras instituciones provenientes de 12 provincias del país han realizado visitas a este parque.

Precisó que de acuerdo a las evaluaciones más recientes del Ministerio de Administración Pública (MAP), 9 de cada 10 visitantes se sienten muy satisfechos con el trato y los servicios que se ofertan.

Entre los espacios preferidos por los visitantes están el primer laberinto de árboles con que cuenta el país, donde se han plantado más de 2,000 cipreses que conforman un divertido y curioso atractivo que disfrutan grandes y chicos por igual.

También el humedal demostrativo brinda una experiencia muy particular al mostrar la restauración de un paisaje degradado y ahora convertido en un área rica en vida silvestre.

Luego, en el punto más alto se encuentra el “Cristo de la Misericordia”, una monumental escultura de más de 15 metros de alto que domina el panorama en todo el Jardín Botánico, convirtiéndose en símbolo de peregrinación o de la curiosidad por el singular perfil artístico que posee.

El Puente colgante y el bosque ribereño son de los rincones más apreciados entre los que gustan del frescor y la exuberante vegetación a orillas del río Jacagua, que atraviesa el Jardín de este a oeste.