Hacen sugerencia para ayudar puertorriqueños

“Si quieren ayudar, háganlo, pero recurran a organizaciones oficiales para enviar dinero, provisiones y bienes de primera necesidad a la isla”, es el llamado de las organizaciones purtorriqueñas en la diáspora que han sumado voluntades creando una activa red solidaria desde que comenzaron a llegar las primeras imágenes del devastador paso de María por la nación caribeña.

atraviesa a día de hoy uno de los momentos más complicados de toda su historia: María, el huracán de mayor categoría que impacta el territorio estadounidenses desde 1928, destruyó por completo las infraestructuras eléctricas de la isla y dejó sin hogar a miles de personas, muchas de las cuales permanecen todavía incomunicadas.

En medio de la incertidumbre a la que se enfrentan tanto los puertorriqueños afectados directamente por el huracán como los que viven en Nueva York, varias organizaciones boricuas han unido sus fuerzas y sus voces para mandar un mensaje de esperanza al mundo: Puerto Rico se levantará, pero para eso es necesario que exista coordinación entre la población, las autoridades y los grupos que colaboran directamente en el proceso de reconstrucción del territorio.

Las diferentes formas de enviar ayuda a la isla, las expectativas de recuperación de cara al futuro y el espíritu de solidaridad que está surgiendo en todas partes del mundo son algunos de los temas a los que se refirieron Frankie Mirando, vicepresidente sénior de la Hispanic Federation; la doctora Mildred Allen, presidenta de la Junta de Directores del Puerto Rican Family Institute (PRFI); Cristy Marrero, vicepresidenta editorial de ¡Hola! USA; Rosa J. Gutiérrez, CEO del PRFI; Louis Maldonado, representante del National Puerto Rican Day Parade; y Marielis Acevedo Irisarri, editora de contenidos digitales de El Diario.

Por su parte, la Ciudad también ha pedido a la población que priorice las donaciones de baterías, comida para bebés, pañales, materiales de primeros auxilios y productos de higiene femenina, y que deje las donaciones de ropa, alimentos y agua en un segundo plano, ya que se han recibido muchas más donaciones que las que por el momento se necesitan de esos productos.