Venezuela trata de recuperarse del apagón que el pasado jueves dejó a la mayoría de estados sin electricidad, provocando además problemas en el suministro de agua, telefonía móvil e Internet.
El Gobierno venezolano responsabiliza de la crisis a EE.UU. y la oposición, denunciando un sabotaje a la hidroeléctrica del Guri, que abastece aproximadamente a un 70% del territorio.
En este sentido, el lunes fueron detenidas dos personas consideradas como los “autores materiales” del “ataque cibernético” a esta represa.
Por su parte, el diputado opositor Juan Guaidó ha llamado a la “emergencia nacional” y acusa el Ejecutivo de falta de previsión y mantenimiento en las instalaciones.
El presidente Nicolás Maduro ha resaltado este martes “la dignidad y la organización” del pueblo venezolano durante el apagón.
El mandatario, que acusa a EE.UU. y la oposición venezolana de realizar “ataques cibernéticos” al sistema eléctrico del país, ha afirmado que durante estos días ha prevalecido “la conciencia y la paz, frente a la conspiración y las agresiones”. “¡Juntos conquistaremos una nueva victoria!”, ha añadido.