PUNTOS…Y PICAS

POR CARLOS MANUEL ESTRELLA

Pérdida de investidura

El estatus del diputado Miguel Gutiérrez, representante por Santiago del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y arrestado en mayo de 2021 en La Florida, Estados Unidos, por cargo de narcotráfico internacional, amerita de una salida constitucional que no puede ser otra que la pérdida de investidura.

El legislador está impedido de asistir a trabajar al Congreso Nacional hace dos años y solo laboró nueve meses, por lo que de acuerdo al reglamento interno de la Cámara de Diputados está en falta, no ha asistido a las sesiones como indica la Constitución y, en consecuencia, debe ser destituido. A tenor de lo que indica el artículo 88 de la Carta Magna, Gutiérrez está sujeto a la pérdida de su condición de legislador mediante la figura del juicio político, estatuido como atribución exclusiva del Congreso, compartida entre diputados, quienes investigan y acusan, y el Senado, que juzga y decide.

La combinación de los artículos 80.1 y 83.1 configura el juicio político que no tiene otro propósito que la destitución del funcionario, para lo cual se requiere el voto favorable de las dos terceras partes de la matrícula de cada cámara, es decir, el 66.6 por ciento de senadores (22) y de diputados (127).

El legislador bajo arresto en Estados Unidos reclama el pago de salarios mientras sus compañeros de la Cámara de Diputados designaron un colega para que haga la instrucción del caso y se proceda con el juicio político por “faltas graves en el ejercicio de sus funciones”, que marca un caso novedoso.

La única “falta grave” sería el ausentismo porque los ilícitos que le atribuyen fuera son antes de ser diputado, no tienen validez aquí y para su postulación presentó certificado de no antecedentes penales, sin pendientes con la justicia local. Si es destituido, su caso marcaria un precedente positivo.