PUNTOS…Y PICAS
Opinión April 27, 2023 Ricardo Rosa
POR CARLOS MANUEL ESTRELLA
Siempre abril
Además de ser mes de primavera y también para celebrar los días de profesionales del periodismo y la locución, del libro y del bibliotecario, así como de la secretaria, abril es período patriótico que recuerda una de las más grandes epopeyas de la segunda mitad del siglo XX: la guerra patria de 1965.
En los últimos años el denominado movimiento popular y comunitario se ha atribuido, con relativo éxito, la “representación” social para convocar a jornadas de protestas que culminan con parálisis parcial y/o regional en las actividades productivas y transporte, bajo el nombre impropio de “huelgas”.
Esto ha transmutado a “moda” sin sentido de lógica que deja resultados negativos, en ocasiones pérdida de vidas, además de la merma en la economía y al final no logra “reivindicaciones” que dicen los organizadores y que son un pliego tan amplio que parece programa de gobierno y deuda social acumulada.
Su “éxito” está garantizado por anuncios mediáticos previos que condicionan la población y hacen que en la víspera del paro, áreas sensibles como transporte, educación y comercio “se sumen” al movimiento forzados por circunstancias, presiones y temores de pérdidas humanas y materiales.
Esa es la triste realidad que lejos de recordar jornadas heroicas de abril, con el pueblo de protagonista, como la revolución constitucionalista de 1965 o la poblada de 1984, hace sumir en el temor por terror y chantaje a la población presa de manipulación de grupúsculos sin incidencia real ni vigencia política.
Esta manifestación cíclica, anual, previsible para este tiempo, debe ser contrarrestada con inteligencia desde los poderes públicos y con militancia ciudadana efectiva para condenarla al fracaso porque “después del” paro parcial nada se ganó y sí se transmutó el real significado de abril patriótico.