PUNTOS…Y PICAS

POR CARLOS MANUEL ESTRELLA

Voto castigo al PLD

El pueblo habló en las urnas en elecciones extraordinarias presidenciales y congresuales del 5 de julio y el Partido de la Liberación (PLD), con su derrota, cultivó lo que sembró en últimos dos cuatrienios del largo ejercicio de gobierno de 20 años, con 16 consecutivos desde 2004.

Ha sido una victoria aplastante para el Partido Revolucionario Moderno (PRM) estimulada más que por simpatías hacia su candidato presidencial Luis Abinader por el repudio y voto de castigo al PLD que sufrió desgaste natural en el poder, agravado con prácticas de autoritarismo, corrupción e impunidad.

Al panorama político se asoma lo que hace menos de un año parecía muy distante y casi imposible: el inicio del fin de la Era del PLD, precipitado por la fragmentación interna forzada por Danilo Medina que derivó en la renuncia del ex mandatario y presidente de la entidad, Leonel Fernández.

Las comparaciones odiosas remiten a 1978 y al fin de los doce años de Balaguer con un voto de castigo como ahora que fue más contra el PLD que a favor de Abinader y que se constituyó en una avalancha o sunami en todo el país para cambiar la composición del Senado y darle amplia ventaja al PRM.

Múltiples lecciones se derivan del dictamen de las urnas sin que haya que hacer leña del árbol caído porque fue un comportamiento colectivo contra la desgastada marca PLD y una primera tesis fácilmente comprobable es que el gran derrotado, único responsable, es Medina, arquitecto del fracaso.

La historia y los peledeístas se encargarán de juzgarlo por su ambición de poder, obstinación con reformar la Constitución para el continuismo, trampas internas a Fernández e imposición del peor candidato presidencial, además de tolerar y apañar la corrupción administrativa. ¡El pueblo habló!.

Por: Carlos Manuel Estrella
cmestrella_@hotmail.com