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POR CARLOS MANUEL ESTRELLA Derecho a la protesta Las manifestaciones de protesta son consustanciales al ejercicio de la democracia contemporánea, son la materialización de... PUNTOS…Y PICAS

POR CARLOS MANUEL ESTRELLA

Derecho a la protesta

Las manifestaciones de protesta son consustanciales al ejercicio de la democracia contemporánea, son la materialización de la libertad de expresión y difusión del pensamiento con rango constitucional y, como todo derecho fundamental, tienen contenido esencial y límites fijados por la Carta Magna.

El derecho a protestar se subsume en la amplia sombrilla del artículo 49 de la Constitución sobre la libertad de expresión e información y tiene conexidad con otras tres libertades establecidas en la Ley de Leyes como son las de tránsito (46), asociación (47) y reunión (48), con sus límites legales.

Bajo el amplio criterio de que “toda persona tiene derecho a expresar libremente sus pensamientos, ideas y opiniones por cualquier medio, sin que pueda establecerse censura previa”, las manifestaciones recientes, en protesta por apresamientos del caso Calamar, son válidas y entendibles en lo político.

Es bien sabido que ningún derecho es absoluto, ni siquiera la vida, y que unos y otros viven en constante conflicto por aquello de que “donde termina tu derecho comienza el mío y viceversa”, y su ejercicio está sujeto a que se haga de conformidad con la ley, con fines lícitos y sin requisito de permiso previo.

De acuerdo al Tribunal Constitucional (TC/0092/18), la protesta “es una expresión del control ciudadano frente a las autoridades que ejercen potestades públicas y procuran que el Estado ofrezca respuestas concretas u acometa acciones ante sus demandas”, de manera que es un medio de presión válido.

En el caso actual, su debilidad es que degeneró en hechos de violencia, como en el Palacio de Justicia de Santo Domingo, y alteraciones del orden con violaciones a disposiciones policiales de seguridad pública, que la convirtió en expresión turbulenta de estrategias políticas antijurídicas para impacto mediático.

Ricardo Rosa

Periodista, labor que realizo desde 1970. He laborado en diferentes medios noticiosos (radio, televisión, periódicos impresos y digitales) tanto de Santiago como de Santo Domingo.

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