Día Nacional del Merengue

POR RAFAEL BALDAYAC

La música es una de las manifestaciones artísticas más universales, expresión cultural con múltiples finalidades, que logra conectar con el alma, con nuestras emociones y estados de ánimo.

En ese ámbito el merengue es el mayor tesoro musical de la República Dominicana, un género por el que otras culturas y naciones nos identifican, y del que todos los dominicanos están orgullosos.

De estas tierras han nacido grandes intérpretes de este ritmo musical que ha trapazado las fronteras y que ha llevado nuestra música por todo el mundo.

¿Qué dominicano se resiste a bailar un buen merengue?, ¿Quién no se motivaría a invitar a su dama a bailar con tan solo escuchar los primeros toques rítmicos del tambor que anuncian el merengue?, y es que el merengue definitivamente es nuestro ritmo por excelencia.

No importa el espacio tan importante que ha obtenido la bachata, el reguetón y otros ritmos tropicales, el merengue sigue siendo el ritmo que contagia, une e invita a los dominicanos a celebrar.

El 26 de noviembre fue escogido para conmemorar el Día Nacional del Merengue.

El merengue es un tipo de música y danza que se originó en la República Dominicana, y se ha convertido muy popular en toda América Latina, y en varias importantes ciudades estadounidenses que tienen comunidades hispanas.

Este género tiene un ritmo moderado a muy rápido, y es interpretado con la güira, la tambora y el acordeón. Los merengues más modernos incorporan instrumentos eléctricos e influencias de la salsa y el rock and roll.

El merengue fue mencionado por primera vez a mediados del siglo XIX. Se originó dentro del valle norteño del Cibao, y más tarde se extendió por todo el país.

El dictador Rafael Leónidas Trujillo convirtió el merengue en el estilo nacional de música y danza del país. Después de su elección, Trujillo ordenó a los músicos componer y tocar numerosos merengues para alabar su dictadura, acciones, virtudes y atractivo para las mujeres.

El merengue llegó a su pico de su popularidad a finales del siglo XX, superando otros grandes géneros musicales latinoamericanos como la salsa.

El 26 de noviembre de 2005 esta práctica cultural tradicional obtuvo un reconocimiento público con la publicación de un decreto presidencial por el que se proclamó el Día Nacional del Merengue.

Hoy los dominicanos conmemoran con orgullo el Día Nacional de Merengue, un género musical que fue declarado (en diciembre de 2016)por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Además recientemente logró entrar al Libro Guiness de Récords por el mayor número de parejas bailándolo de manera sincronizada el pegajoso ritmo.

La decisión fue tomada por Comité intergubernamental al considerar que el merengue dominicano “desempeña un papel activo en numerosos ámbitos de la vida diaria de la población: la educación, las reuniones sociales y amistosas, los acontecimientos festivos e incluso las campañas políticas”.

Actualmente existen tres tipos principales de merengue: merengue típico (perico ripiao), merengue de orquesta y merengue de guitarra.

Nuestro merengue, como cualquier otra música popular, es un lenguaje universal, que une a las personas sin importar la nacionalidad, color o raza y tiene el poder de alegrarnos, edificarnos, inspirarnos, enriquecer nuestras vidas y acercarnos más a Nuestro Padre Celestial cuando somos sabios al elegirla.