Arzobispado pide congresistas dejen barrilito y cofrecito

SANTIAGO.- El Arzobispado de esta ciudad pidió a los congresistas nacionales dar ejemplo de austeridad, asegurando que, hasta el momento, son una casta privilegiada.

De manera fundamental, resalta las concesiones económicas que reciben a través del barrilito y el cofrecito “así como de otros privilegios de los que disfrutan”.

La sugerencia está contenida en el editorial del próximo domingo del semanario Camino, órgano de difusión de esa entidad religiosa, titulado “Políticos y pobreza”.

Remarca que esas facilidades son una bofetada en el rostro languideciente de tantos dominicanos, por lo que pide a los legisladores empezar a eliminar “esos injustificables y escandalosos privilegios”.

“Es hora de comenzar el cambio de una sociedad que exige a gritos grandes transformaciones”, insiste Camino y reclama a los congresistas que jamás  justifiquen esos gastos que hace el Estado en ellos “en detrimento de los sectores más excluidos del país”, al tiempo que les recuerda que prometieron que ahora sería diferente.

Sostiene el semanario católico que se hace urgente cambiar de actitud frente a los más pobres y que cada uno puede aportar desde el espacio que ocupa en la sociedad.

Camino estima que el cambio de una sociedad, para llegar a niveles de vida más ­dignos supone el compromiso y esfuerzo de todos. “Ese anhelo requiere  entrega y sacrificio, sobre todo de los que más tienen, ahora más que ayer, por la consecuencia que nos ha traído el covid-19”.
En otro sentido, recuerda que la pobreza extrema ha aumentado entre un 3.6 y el 4.8 en América Latina y el Caribe, según la FAO, y que el país no escapa a ese contexto regional.
”En nuestras calles encontramos el reflejo de esta situación. Hay más personas mendigando, enfermos mentales mostrando el abandono familiar y del Estado”, dice.

Que hay hogares que han visto descender sus ingresos a niveles increíbles, teniendo que sobrevivir soportando carencias esenciales, con la secuela que deja este nuevo estilo de vida al cual sus miembros no estaban acostumbrados.