PUNTOS…Y PICAS

POR CARLOS MANUEL ESTRELLA

Cultura en Santiago

La evaluación del gobierno municipal de Santiago es positiva en la higiene pública y mejoramiento de imagen para visitantes y nativos no así en la gestión cultural, uno de sus puntos cuestionables, que adquiere notoriedad con el conflicto por el “bulevar de los artistas” en la calle Benito Monción.

Para los gestores culturales auténticos y tradicionales de la ciudad desde el ayuntamiento ha habido ignorancia olímpica hacia el sector y las acciones se han centrado en “allante y movimiento” potenciado por la vigencia mediática derivada de promover figuras del firmamento farandulero.

La persona del alcalde y del encargado municipal del área han sido ausentes constantes en actividades relevantes de instituciones culturales centenarias y tradicionales de la promoción del sector a las que son invitados y practican la descortesía como forma de actuar ante convocatorias y cartas.

El alcalde nunca ha visitado la casa del arte y ahora quiere ser su Chapulín

El mayor logro del cuatrienio 2016-20 del gobierno local en cuanto a cultura es negar, reducir y/o retrasar las magras asignaciones llamadas subvenciones o aportes a estas entidades que por años se han mantenido en medio de precariedades extremas y sobreviviendo casi de caridad pública.

La obra de relumbrón es pintura y murales, sin planes ni acciones concretas articuladas con verdaderos gestores culturales y lo ocurrido con el “bulevar de los artistas” de la Benito Monción lo confirma, pues el alcalde, nunca ha visitado como tal a Casa de Arte y ahora quiere ser su Chapulín.

Por la prepotencia de la alcaldía, creerse por encima del bien y del mal, no actuó como debió ante decisiones judiciales que hoy enfrentan a vecinos de la Benito Monción con el ayuntamiento por la peatonización o no de esa vía que debe ser preservada como “bulevar de los artistas” y con su Arte Vivo.