SANTIAGO.- Con un acto religioso, que tuvo como escenario el Santuario Nuestra Señora de la Altagracia, de esta ciudad, fue conmemorado ayer el aniversario 36 del suicidio del presidente Antonio Guzmán Fernández, ocurrido el 4 de julio de 1982, 43 días antes de concluir su mandato como ejecutivo de la Nación.
La actividad, presidida por el padre Juan Tomás García, párroco de ese templo religioso, contó con la presencia de decenas de personas, encabezadas por Sonia Guzmán de Hernández, hija del difunto mandatario y varios de sus nietos, entre ellos Iván Hernández Guzmán.
Al término de la eucaristía, la señora Guzmán de Hernández dijo que su familia se siente satisfecha por la muestra de cariño y valoración que le ha otorgado el pueblo tanto al gobierno a la persona de Guzmán Fernández.
“La presencia aquí de tanta gente es una muestra de que mi padre cosechó una gran cantidad de amigos y que el pueblo lo recuerda con cariño, porque creó instituciones que han servido a la sociedad desde entonces, como el Infotep, Conani y el Plan Sierra”, enfatizó.
La noche del 3 de julio de 1982 el presidente Guzmán Fernández se hizo un disparo a la cabeza, tras sentarse en un sillón de barbería que estaba ubicado en un baño próximo a la oficina presidencial.
Tras varias horas de esfuerzo de médicos por mantenerlo con vida, tras ser llevado a un hospital de la capital, fue declarado muerto en horas de la madrugada del 4 de julio.
Ricardo Rosa
Periodista, labor que realizo desde 1970. He laborado en diferentes medios noticiosos (radio, televisión, periódicos impresos y digitales) tanto de Santiago como de Santo Domingo.