Reenvían juicio acusadas tráfico dinero

SANTIAGO.- Por segunda ocasión fue aplazada el pasado viernes, ahora para el 22 de estes, la audiencia en materia de apelación, de dos mujeres a quienes en mayo pasado se les dictaron 10 meses de prisión preventiva, por su alegada vinculación en más de 2 millones de dólares que fueron decomisados el pasado mes de abril en el puerto de Haina y varios paquetes de drogas incautados durante allanamientos en dos residenciales de esta ciudad.

Tanto el Ministerio Público como los abogados de la defensa de Miguelina Franco y Luisa Amelia Fermín Hernández, consideran no fue justa la medida coercitiva. La fiscalía alega que fue benigna y los defensores técnicos la considera exagerada.

La primera vez fue reenviada para el viernes último, ocasión en que los jueces de la Corte de Apelación la aplazaron para el 22 de este mes, en vista de la imputada Fernández cambió de abogado y este pidió tiempo para estudiar el expediente, lo que le fue concedido.

Otro incidente que primó para el reenvío fue que uno de los jueces del tribunal se inhibió del caso, debido a que es familiar cercano de uno de los abogados defensores de las imputadas.

Las Franco es señalada como la pareja de Fernando José Esteffani Fermín, quien se halla prófugo, es el principal sospechoso del dinero decomisado, en tanto que Fernández es su madre.

Ambas guardan prisión preventiva en el Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR) Rafey mujeres y son acusadas por las autoridades de pertenecer a una red internacional de narcotráfico y lavado de activos.

Las autoridades también persiguen a Josuan Enmanuel Fernández Fernández, Marcos Freiki Peña y Francisco Vargas, así como al venezolano Diego Fernando Gutiérrez Delgado, y el colombiano Luis Carlos Gutiérrez Morales.

Por este caso, el Ministerio Público en al menos 14 allanamientos se incautó de bienes millonarios, entre ellos nueve apartamentos, 25 vehículos (15 de ellos de lujo) una lancha, motocicletas, una finca, varias armas de fuego y además 40 paquetes de cocaína.

El grupo es acusado de los envíos de dólares que eran realizados a través de una compañía que hace mudanzas desde los Estados Unidos y llegaban en contenedores al muelle de Haina Oriental, mezclados con mercancías diversas y productos comestibles.