Persisten daños ocasionó el huracán María Persisten daños ocasionó el huracán María
SANTIAGO.- Siete meses han transcurrido desde que la noche del 21 de septiembre del pasado año se produjo el desborde del arroyo Pontezuela, inundando... Persisten daños ocasionó el huracán María

SANTIAGO.- Siete meses han transcurrido desde que la noche del 21 de septiembre del pasado año se produjo el desborde del arroyo Pontezuela, inundando amplias franjas de los sectores El Embrujo III, El Ensueño, Fracatán y El Retiro.

Fueron millonarias las pérdidas provocadas por ese desastre de la naturaleza, evento que tuvo su origen en las fuertes y prolongadas lluvias que ese día provocó en esta zona del país el huracán María.

A pesar de que desde entonces han discurrido siete meses, los lugares afectados no han sido intervenidos por la Alcaldía ni el Ministerio de Obras Públicas.

La avenida que bordea el arroyo El Ensueño, por el sector del mismo nombre y que incluye el Fracatán y El Retiro, cuyo pavimento se destruyó en algunos lugares, impidiendo el tránsito de vehículos, desde entonces no ha cambiado de aspecto.

Las viviendas sufrieron severos daños en sus estructuras hasta el extremo de que muchos de sus propietarios desde entonces las tienen en venta y, aunque sus precios se devaluaron por aquel evento, aun así, nadie se interesa por adquirirlas.

Lo que en aquella ocasión ocurrió fue producto del taponamiento del cauce original del arroyo, situación que todavía persiste y que, cuando llueve en el área con cierta intensidad, hace que las aguas se desplacen por la avenida, lo que hace suponer que en cualquier momento se reedite la pesadilla que se vivió la noche del 21 de septiembre pasado.

Mientras tanto los dueños prefirieron mudarse a otros lugares, a la espera de poder negociarlas, ante la presunción de que en cualquier momento las aguas del arroyo volverán a desbordarse.

Así como decenas de viviendas se hallan en esas condiciones, lo mismo ocurre con los establecimientos comerciales que fueron inundados por aquellas aguas, que salieron de sus cauces la noche de ese 21 de septiembre, provocando una gran incertidumbre entre los residentes en esos lugares, que nunca habían vivido una experiencia de esa naturaleza.

Daniel Báez hace 13 años comenzó un pequeño negocio de producción de sazones y otros productos para cocinar y decidió instalarlo en El Ensueño, el sector que lo vio nacer hace 35 años.

Con el paso del tiempo y el trabajo tesonero poco a poco vio su negocio prosperar, hasta convertirlo en el sustento de su familia y de una apreciable cantidad de personas que laboraban allí.

Pero aquella inclemencia del tiempo virtualmente borró lo que hasta entonces era un negocio que crecía, pues las aguas no solo dañaron severamente las maquinarias que utilizaba, sino que también se llevaron el presente que vivía y el futuro que proyectaba.

De hecho, la impetuosidad del agua hizo que arrastrara consigo algunos de los vehículos que utilizaba en la distribución de los productos que procesaba y, aunque inservibles, los recuperó a una considerable distancia de su negocio.

Las pérdidas económicas que sufrió fueron cuantiosas, de las que le será difícil recuperarse por todos estos años. Pero ante la posibilidad de que la experiencia se repita, se está preparando para instalar se empresa en un lugar más seguro, viéndose obligado a dejar atrás el lugar donde nació y que le sirvió de plataforma para su formación como empresario.

Y mientras ese momento llega, tanto él como las demás personas que aún residen en la zona mantienen la esperanza de que las autoridades readecuen las áreas públicas afectadas por aquel evento de hace siete meses.

 

Ricardo Rosa

Periodista, labor que realizo desde 1970. He laborado en diferentes medios noticiosos (radio, televisión, periódicos impresos y digitales) tanto de Santiago como de Santo Domingo.

Baracoero