POR CARLOS MANUEL ESTRELLA “Sonamos” en España Las acciones judiciales anti corrupción están de moda en Iberoamérica y son tema de permanente actualidad pública....

carlos-manuel1POR CARLOS MANUEL ESTRELLA

“Sonamos” en España

Las acciones judiciales anti corrupción están de moda en Iberoamérica y son tema de permanente actualidad pública. Los escándalos se suceden día a día desde España hasta Brasil sazonados en el vecindario latinoamericano con el escándalo Odebrecht esparcido por doquier.

Aunque el entramado delictivo admitido por constructora carioca operaba con similar estructura en cada territorio, en el país las autoridades pretenden aparentarlo diferente y aplicarle medicamentos distintos para igual padecimiento sistémico que, como cáncer, ya hizo metástasis.

El caso Odebrecht es la gota que rebosó la paciencia ciudadana por la tolerancia gubernamental a corrupción y estímulo encubridor con impunidad dando lugar al Movimiento Verde, expresión de rebeldía y exigencia cívica de acciones públicas condignas a magnitud de la crisis moral en desarrollo.

Nuevos casos escandalosos siguen descubriéndose en Iberoamérica, específicamente en España, y resurge otra “conexión dominicana” que revela tramas delictivas de cuello blanco en el país como parte de esquemas de prácticas ilícitas internacionales vinculadas a contratos de obras públicas.

Se percibe que el país es un paraíso para esquemas internacionales de corrupción
La prensa escrita española pone “a sonar” negativamente al país otra vez, ahora en caso Canal Isabel II, en que un juez acusa al ex funcionario imputado de cobrar comisiones en Latinoamérica y lucrarse por contratos en Brasil, Colombia y República Dominicana.

Según infografía de la red internacional del caso, publicada por el diario El Economista, de España, (20-4-17, pág. 8), las empresas dominicanas utilizadas en desviar fondos y blanquear capitales fueron Watco Dominicana, AAA Dominicana, Informaciones Remotas y R&T Resultados y Tecnología.

La percepción exterior es que República Dominicana es paraíso para esquemas internacionales de corrupción de cuello blanco, pública y privada, que para muestra tiene múltiples ejemplos con Odebrecht, Tucanos, Del Tiempo Marques, para citar solo algunos y ahora con el Canal Isabel II.

¿Hasta cuándo “sonaremos” negativamente en el exterior?, ¿quién le pone cascabel al gato?

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Ricardo Rosa

Periodista, labor que realizo desde 1970. He laborado en diferentes medios noticiosos (radio, televisión, periódicos impresos y digitales) tanto de Santiago como de Santo Domingo.

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