Miguel Cruz Tejada NUEVA YORK.- La fiscalía del condado Essex en Massachusetts, justificó el uso de fuerza letal de parte de policías que acribillaron...

Miguel Cruz Tejada

NUEVA YORK.- La fiscalía del condado Essex en Massachusetts, justificó el uso de fuerza letal de parte de policías que acribillaron a balazos al tamborero dominicano Antonio González (Tony Tambora), después que él  sefiscales-justifican-muerte-de-tamborero atrincheró con su hija, luego de intentar matar a su mujer, Yenny Santos, el 26 de abril de este año en un edificio de apartamentos en Lawrance.

Un equipo SWAT rodeó la casa y las autoridades alegaron que el músico, rompió el vidrio de una de las ventanas y disparó contra los agentes.

Varios oficiales entraron y después de matar al tamborero, rescataron al niño con el que salieron  en brazos. La tragedia ocurrió en el 18 de la calle Melrose. El apartamento está en la tarcera planta.

González, supuestamente celaba a la señora Santos, ambos nativos de San Francisco de Macorís, revisaba frecuentemente el celular de la mujer, y según ella, la golpeó y la amenazó de muerte varias veces.

Su último encuentro, fue el día en el que la policía lo liquidó y él la besó en la boca, diciéndole “vamos a estar bien”, reseña el periódico local Eagle Tribune.

El tamborero había sido detenido varias veces por denuncias de Santos que también había pedido órdenes de alejamiento en la corte.

González supuestamente alternó entre apuñalar a Yenny Santos, su novia de 11 años, y atender a su hijo de 4, quien también estaba en el apartamento.

Al sufrir por lo menos dos heridas profundas en la cabeza, Santos “fingió estar muerta” esperando que González dejara de atacarla la mañana del 26 de abril.

“Ella recuerda que González la besó repetidamente en los labios y le dijo vamos a estar bien”, según un informe de la fiscalía.

Los fiscales alegan que mientras la policía rodeaba la casa de apartamentos, González apuntó un arma a  través de una ventana del tercer piso, y el sargento. Maurice Aguiler disparó y mató a González,  acción ahora legalmente justificadas”, dijeron los fiscales.

La pistola de González, que más tarde resultó inoperable, cayó de la ventana del tercer piso a la acera de abajo.

“Sobre la base de todas las pruebas en este caso, el sargento Aguiler actuó razonablemente con el uso de la fuerza letal contra Antonio González”, según un informe de investigación publicado esta semana por el fiscal de distrito del condado Essex Jonathan Blodgett.

Santos, de 36 años, madre de tres hijos, sobrevivió al ataque y continúa recuperándose. Su hijo de 4 años, encontrado cubierto de sangre, fue rescatado del apartamento por la policía.

Los investigadores dijeron inicialmente que González, de 34 años, murió de una herida de bala autoinfligida y luego más tarde, que posiblemente había muerto a causa de disparos de respuesta de la policía.

Informes de autopsia y toxicología, recibidos el 28 de noviembre, dijeron que una herida de bala fue la causa de la muerte de González “con lesiones en el cráneo y el cerebro”.

Niveles de alcohol y cocaína también se encontraron en el sistema de González, según las conclusiones del fiscal Blodgett.

“En este caso, varios policías y dos civiles creían que González les había disparado y en el momento en el que disparó y lo mató el oficial Aguiler observó personalmente a González apuntando con un arma de fuego contra él, otro oficial y dos civiles”, dijo la fiscalía.

“Sobre la base de todas las pruebas en este caso, el sargento Aguiler actuó razonablemente en el uso de la fuerza letal contra Antonio González y no tiene ninguna responsabilidad penal por dispararle”, concluye el informe de los fiscales.

El jefe de la policía de Lawrence, James Fitzpatrick, bajo escrutinio por la desaparición y decapitamiento del estudiante dominicano de 16 años de edad, Lee Manuel Viloria Paulino,  dijo que “el uso de la fuerza letal es el acto más solemne que un oficial de policía puede realizar y es vital que estas investigaciones se lleven a cabo de una manera transparente y diligente”.

La fiscalía dijo que su investigación incluyó entrevistas con personas que estuvieron en contacto con González hasta el tiroteo y cuando ocurrieron los disparos, agentes de policía de Lawrence presentes en la escena, un examen de evidencia encontrada en la escena, transmisiones de radio de la policía de Lawrence e informes del médico forense y el examen de  balística de la Policía Estatal de Massachusetts.

En marzo de 2016, Santos y sus hijos hicieron un largo viaje a la República Dominicana. Mientras estaba ausente, el hijo mayor de Santos envió un mensaje de texto a González y le dijo que su madre salía por la noche con otros hombres.

“González reaccionó mal, enviando mensajes de texto a Santos acusándola de infidelidad y amenazándola con matarla”, explica el informe.

También habría publicado fotos de armas de fuego en las redes sociales y enviado esas imágenes a Santos.

La mujer  y los niños regresaron a Lawrence el domingo 24 de abril. La mañana siguiente, Santos y un amigo fueron a la Corte del Distrito de Lawrence y obtuvieron una orden de restricción contra González.

El tamborero, recibió la orden de abandonar el apartamento en el 18 de la calle Melrose y permanecer alejado de Santos.

Debido a un fallo en el sistema informático de la policía en Lawrence, González no recibió inmediatamente la orden de restricción.

“Entrevistas con Santos, así como con miembros de la familia de González, establecen sin embargo que González estaba al tanto de la orden de restricción y que originalmente, abandonó el apartamento”, revela el informe.

El martes 26 de abril, Santos se levantó y se preparó para ir a trabajar mientras sus dos hijos mayores salían para la escuela. Su hijo de 4 años todavía estaba en la casa con ella.

González apareció, llamando a la puerta y diciendo que estaba allí para buscar ropa. Santos lo dejó entrar, pero pronto se dio cuenta de que estaba armado con un cuchillo, le dijo ella  a los investigadores.

La agarró por el pelo, le dio un puñetazo en la cara y la arrastró hasta el dormitorio. González le dijo al niño que jugara, pero el niño pequeño se armó con un cuchillo y golpeó a su padre tratando de proteger la madre.

González apuñaló a Santos un par de veces antes de ir a la sala de estar para jugar con su hijo, sostiene el informe oficial.

“Durante las dos horas siguientes, González alternó entre apuñalar a Santos que estaba en el dormitorio y atender a su hijo en la sala de estar y la cocina”, según el informe.

También hizo varias llamadas a sus hermanas, madre y un amigo, a quienes les dijo que había matado a su esposa y que necesitaba que  fuera a recoger a su hijo.

El amigo fue directamente a la policía de Lawrence, antes del mediodía. Los oficiales fueron enviados al apartamento  para investigar una posible situación de homicidio y rehenes.

 

 

LA MUERTE

Aguiler estaba entre los numerosos oficiales de Lawrence que respondieron a las llamadas. Los agentes dijeron que escucharon lo que sonaba como disparos y luego escucharon el sonido del vidrio roto en el tercer piso.

En su radio de policía, Aguiler gritó: “disparos, nos están disparando, disparos están disparándonos” y comenzó a devolver el fuego.

El detective Brian Voisine y Aguiler trabajaban ahora para mantener a salvo a dos mujeres. González entonces reapareció en la ventana del tercer piso y levantó el brazo en dirección a ellos.

“El sargento Aguiler volvió a disparar y González desapareció de vista, las dos mujeres observaron caer un arma desde la ventana en la que González había estado de pie”, según el informe.

Todavía dentro del apartamento y consciente, Santos dijo que escuchó disparos y luego el golpe seco de González cayendo al suelo.

“Cuando pasó un tiempo sin moverse, pudo llegar a la puerta del dormitorio, que González había cerrado con llave, abrirla y agarrar a su hijo. Ella tomó al niño y se deslizó por las escaleras del tercer piso a la segunda planta, donde se desmayó”, detalla el informe.

Los oficiales del equipo SWAT entraron en el edificio y encontraron al niño, que estaba cubierto de sangre y les informó que sus padres estaban muertos.

Los policías estatales enviaron un robot que les permitió confirmar que González “estaba abajo”. Los miembros del equipo de SWAT entraron en el edificio de apartamentos y encontraron a Santos en el segundo piso.

La trasladaron al Hospital General de Lawrence y posteriormente al Hospital General de Massachusetts.

Santos fue tratada por múltiples heridas punzantes, que incluyeron dos heridas penetrantes en su cabeza, según el certificado médico anexado al informe de los fiscales.

González nació en Tenares, en la República Dominicana, y trabajó como músico y  actor, según su perfil en facebook.

 

 

Ricardo Rosa

Periodista, labor que realizo desde 1970. He laborado en diferentes medios noticiosos (radio, televisión, periódicos impresos y digitales) tanto de Santiago como de Santo Domingo.

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